Guggenheim
se iniciaba en el largometraje de ficción con “Amores Que Matan” en el 2000 con
la intención de probar suerte tras sus comienzos en el mundo de las series de
televisión, dirigiendo algunos capítulos de “Policías en Nueva York” (Steven Bochco y
David Milch, 1993.2005) o “Urgencias” (Michael Crichton, 1994-2009), entre
otras. “24” (Robert Cochran y Joel Surnow, 2001-2010), “Alias” (J.J. Abrams,
2001-2006), “The Shield: Al Margen de la Ley” (Shawn Ryan, 2002-2008) o
“Deadwood” (David Milch, 2004-2006) precedieron a su primer largometraje
documental, “Una Verdad Incómoda” (2006), sobre los efectos del cambio climático,
que le llevó a recoger importantes premios otorgados por la Asociación de
Críticos de Chicago y de Los Ángeles, los Critics’ Choice Awards o, incluso, los Oscars, en donde se alzó con el premio al mejor
documental y canción original, afianzando así su carrera en este tipo de cine.
martes, 27 de febrero de 2018
EL AROMA DE LAS CUERDAS (2008)
Etiquetas:
2008,
Cine Periférico,
Davis Guggenheim,
documental,
documental sobre música,
Estados Unidos,
It Might Get Loud,
Jack White,
Jimmy Page,
Led Zeppelin,
The Edge,
The Raconteurs,
The White Stripes,
U2
martes, 20 de febrero de 2018
EL MUNDO DE LOS JUGUETES ROTOS (2013)
A
través de “Arirang” (2011), el primer documental del popular autor surcoreano
Kim Ki-Duk, se desató la polémica. En el metraje, plasmaba su retiro a las
montañas tras verse inundado por una profunda crisis. La traición por parte de
su equipo de confianza le llevó a perderse en sí mismo, siendo muestra de ello
su fallida obra “Amén” (2013). Aquel cineasta que eclipsó a la
crítica y público occidental con obras maestras como “Primavera,
Verano, Otoño, Invierno… y Primavera” (2003), “Hierro 3” (2004) o “El Arco” (2005) sentía que su carrera comenzaba
a descender sin poder impedirlo y lo evidenciaba a través de sus lágrimas,
mientras visualizaba su filmografía delante de sus propios ojos. Ese dolor le
ha llevado a la controversia con sus siguientes cintas, “Pietà” (2012) y
“Moebius” (2013), dominadas por sus mayores miedos y traumas, pero su depresión
no logró retirarle del circuito de festivales internacionales más importantes.
Al
mismo tiempo, su faceta como guionista se ha visto más desarrollada, contando
con la colaboración de sus pupilos y otros realizadores de menor recorrido, como es
el caso del director Shin Yeon-Shick, a quien entregó la historia de “Rough
Play” (“Actor Is An Actor”). Oh Young (Lee Joon) es un joven actor que arrastra viejos problemas del
pasado que alimentan su inseguridad. Sin embargo, sus ansias de triunfar en el
mundo de la interpretación le llevan a aceptar papeles denigrantes que, en
cambio, le reportan, poco a poco, un gran éxito. La fama comienza a consumirle, desatando un
alter ego incapaz de dominar, un lado oscuro que atenta contra otros y contra
sí mismo, hundiéndose en el fango de lo que un día pudiera construir. Con
ciertas similitudes a lo que ocurrió en la vida profesional de Kim Ki-Duk, probablemente
nunca sepamos si se trata de la realidad o de simples casualidades.
Etiquetas:
2013,
cine,
Corea del Sur,
Críticas,
drama,
Kim Ki-Duk,
Lee Joon,
Ma Dong-Seok,
Rough Play,
Seo Yeong-Hie,
Shin Yeon-Shick,
teatro,
Yang Dong-Kun
martes, 13 de febrero de 2018
CUANDO EL TIEMPO SE DETIENE (2011)
El
proceso de duelo es muy personal. A pesar de que todos desfilamos por las mismas etapas
(negación, enfado, negociación, depresión y aceptación), cada uno gestiona sus
emociones de una forma muy particular, ya sea individualmente como
recurriendo a la ayuda de un profesional. Sin embargo, a parte de estos
factores internos, existe una carga social de la que es difícil desprenderse.
Esta es una de las cuestiones que se presentan en “La Delicadeza”, el primer largometraje de los
directores y guionistas franceses Stéphane y David Foenkinos, que logró dos
nominaciones a los Premios César en 2012. Una comedia romántica realmente
sencilla, que muestra la necesidad de buscar nuestro propio camino
independientemente de las presiones que surjan de la sociedad, de las
decisiones “políticamente correctas” que deben cumplirse cuando un ser querido
ha dejado de estar a nuestro lado.
La historia está basada
en la novela de David Foenkinos, todo un superventas en Francia que
cumplió en la taquilla, alcanzando una recaudación nacional de más de 400.000
euros. En ella, Nathalie (Audrey Tautou) es una mujer que se enamora
perdidamente de François (Pio Marmaï) como si fuera un capricho del destino.
Una pareja idílica que contraen matrimonio y que disfrutan de su día a día a
pesar de las presiones de sus padres por tener un hijo. Una mañana, François
sale a correr, pero ese mismo destino que los unió, decide separarles a través
de un siniestro accidente. Nathalie recibe la noticia de que se marido ha
fallecido y, lejos de distanciarse de toda su rutina, decide volver a la
oficina lo antes posible y evitar que su alrededor siga observándola con
tristeza. Volcada totalmente en su trabajo, es ascendida en el departamento al
que llega Markus Lundell (François Damiens), un sueco bastante introvertido que
nunca ha tenido éxito en las relaciones de pareja. En un inesperado arrebato,
Nathalie besa a Markus tras discutir con su jefe, marcando el inicio de un
necesario resurgir de las cenizas que dejó la pérdida de François.
Etiquetas:
2011,
Audrey Tautou,
comedia,
comedia romántica,
Críticas,
David Foenkinos,
Francia,
François Damiens,
La Delicadeza,
Pio Marmaï,
romance,
Stéphane Foenkinos
martes, 6 de febrero de 2018
CEGADOS POR LA OBSESIÓN (1991)
El
director y guionista surcoreano Jang Sun-Woo no gozaba de gran popularidad a
nivel internacional a pesar de recibir importantes reconocimientos por sus obras, como
el Premio Alfred Bauer por “Passage to Buddha” (1993), en el Festival de Berlín;
o la mención especial en el Premio KNF por “A Petal” (1996), en el Festival de
Rotterdam, siendo ambos de los primeros largometrajes que dieron pie a la nueva
ola de cine en el país. A nivel
nacional, Jang Sun-Woo es todo un reputado crítico de cine que, sin embargo,
detuvo su carrera tras las cámaras en 2002, con el estreno de la que fue su
última película, “Resurrection: Empieza el Juego”, una comedia de acción con
toques de ciencia ficción que no pasó más allá de las fronteras de Corea del
Sur. Con una trayectoria nacida al albor del movimiento realista de la década de
los 80, su influencia es obvia en su escasa filmografía, con historias
realmente cercanas y cuestiones globales tratadas con gran respeto y distancia.
Primero
fue la enfermedad psicológica de un hombre que se creía ser Jesús y debía
salvar la ciudad de Seúl en “Seoul Jesus” (1986), después llegaron las ansias
de éxito y venganza en “The Age of Success” (1988) y, más tarde, en “The Lovers
of Woomuk-Baemi” (1990), el autor se dejaba llegar por un sufrido romance que,
plasmaría, de una forma bien distinta en su siguiente cinta, “The Road to the
Racetrack” (1991). R (Mun Seong-Kun) es un hombre que regresa de Francia tras
finalizar sus años de doctorado. Ya es hora de enfrentarse a la realidad, a una
familia que dejó atrás y a la que hace tiempo que no ve. Los sentimientos son
bien distintos, ya que su anhelo por volver no es por reencontrarse con sus
padres, esposa e hijos, sino por J (Kang Soo-Yeon), una de sus compañeras de
estudios con la que tuvo un romance que espera retomar a su llegada. Sin
embargo, J ya no es la mujer que él creía conocer y su idilio parece tener los
días contados.
Etiquetas:
1991,
Corea del Sur,
Críticas,
drama,
drama romántico,
Jang Sun-Woo,
Kang Soo-Yeon,
Mun Seong-Kun,
romance,
The Road to the Racetrack
Suscribirse a:
Entradas (Atom)