lunes, 30 de agosto de 2021

LA MÁGICA OSCURIDAD DE LA MÚSICA (2020)

El halo de misterio que siempre ha poseído y que aún mantiene la figura de David Bowie es precisamente lo que provoca que pocos se atrevan a realizar algún biopic, pese a que su legión de fans a escala global muy probablemente no querría perdérselo. En este sentido, el director y guionista británico Gabriel Range es uno de los pocos cineastas que se han arriesgado a plasmar en pantalla al mítico artista. Distanciándose de todo tipo de ambiciones para quedarse únicamente con el retrato de los inicios transnacionales del cantante. Con un título más que idóneo, “Stardust” nos ofrece la primera gira estadounidense que llevó a cabo David Bowie (Johnny Flynn) durante 1971 y cómo resultó todo un viaje iniciático que supuso un punto de inflexión no solo en su camino al estrellato, sino también en él mismo. Se trata, por tanto, de un momento sumamente crucial, puesto que estamos ante el nacimiento de Ziggy Stardust en los suburbios londinense y en compañía de The Spiders from Mars.

La trayectoria profesional de Range comenzó a llamar la atención a partir de su obra “Muerte de un presidente” (2006), un falso documental que jugaba con la hipótesis de un posible asesinato de George W. Bush y que se alzó con varios premios, destacando el galardón obtenido en Toronto. El autor siempre ha intentado mantenerse muy cerca de la realidad independientemente del género que maneje, como la historia de los ladrones que quisieron robar el diamante más grande del mundo en el Millennium Dome en “The Great Dome Robbery” (2002), el posible colapso del sistema de transporte británico en “The Day Britain Stopped” (2003), una recesión de Reino Unido y Estados Unidos bajo el efecto dominó generado por un ataque terrorista en “The Man Who Broke Britain” (2004), una mirada al pasado para plasmar el comercio de esclavos en Londres en “I Am Slave” (2010) o la tauromaquia en la infancia con “Little Matador” (2012). Tampoco es la primera vez que se aventura a profundizar en la vida de alguien destacado, como en “Falso profeta” (2014), sobre el líder fundamentalista mormón Warren Jeffs; o “Supersleuths: The Menendez Murders” (2003), en torno al impactante caso de los hermanos Lyle y Erik Menéndez.

miércoles, 18 de agosto de 2021

EL PAÍS DE LOS SUEÑOS DESTRUÍDOS (2020)

El primer largometraje de la directora, guionista, productora y artista franco-libanesa Chloé Mazlo es toda una arriesgada aventura en tierras libanesas. “Bajo los cielos del Líbano” nos descubre una historia muy diferente dentro de los patrones del género dramático a la vez que la cineasta, en colaboración con la guionista Yacine Badday, nos acompaña en una revisión de la memoria histórica a lo largo de casi 30 años de recuerdos y vivencias a través de Alice (Alba Rohrwacher), una joven que decide abandonar su país natal, Suiza, para encontrarse a sí misma. Estamos en la década de los 50 cuando se traslada a vivir a Beirut, en donde logra su primer trabajo y también toma contacto con Joseph (Wajdi Mouawad) en una cafetería. El paso de los días hace que, poco a poco, sus mesas cada vez estén más cerca entre ellas hasta que, por fin, ambos inician una relación. Joseph es un astrofísico que ha iniciado un proyecto de investigación para enviar el primer cohete libanés al espacio. Parece un plan ambicioso, pero en realidad vendría a demostrar que el Líbano se posicionaría en el panorama internacional con una población inmersa de lleno en la modernidad.

Así es como la obra de Mazlo inicia su andadura en tiempos de paz junto a una pareja que irá evolucionando con total normalidad y sin sobresaltos, momentos de felicidad que suceden dentro del matrimonio hasta que el tiempo se detiene en el peor instante posible: estalla la Primera Guerra del Líbano en 1982. A partir de entonces, todo cambia. Alice ve cómo sus amistades pierden sus hogares y se ve forzada a realojarlos en la suya. En las calles, se producen enfrentamientos, mientras la familia se cobija entre cuatro paredes, intentando mantener la normalidad pese a todo. Definitivamente, “La Suiza de Medio Oriente”, como se conocía al país, había quedado reducida a cenizas y, aun teniendo este panorama frente a ellos, Alice se niega a abandonar su casa porque no concibe que sus vidas pueden correr peligro. Aunque bien pareciera que el contexto planteado podría inyectar ese dramatismo con el que se ha categorizado la película, lo cierto es que la sátira domina en todo momento la cinta, pero no por ello se pierde la importancia de los hechos que acontecen durante estos años.

viernes, 13 de agosto de 2021

EL SUEÑO DE UN MENSAJE IMPOSIBLE (1987)

Esta contemporaneidad en la que el contenido digital, los cambios y la inmediata actualidad mandan, no nos impide que podamos recatar el pasado desde su fisicidad entre tantas cuentas pendientes. El salto del analógico al digital provocó, entre otras consecuencias, que muchas películas independientes quedaran en el olvido durante décadas, como fue el caso de “Friendship’s Death”, cuya restauración corrió a cargo del British Film Institute. El primer largometraje en solitario del director, guionista y teórico británico Peter Wollen supone una obra realmente valiosa al ser la última película que el cineasta realizara antes de retirarse para dedicar sus esfuerzos a la investigación académica en la Universidad de California. Para muchos, es una cinta totalmente desconocida que reclama nuestra atracción por su actriz protagonista, una jovencísima Tilda Swinton que intentaba abrirse paso en el mundo de la interpretación con su sexto trabajo, tal vez, el que más atención generó en su momento.

El British Film Institute no pudo dejar pasar la oportunidad de ofrecer esta obra a los cinéfilos tras las incalculables colaboraciones con el centro que Wollen realizó en formato libro con investigaciones sobre Orson Welles, Howard Hawks, Andy Warhol o clásicos del cine como “Cantando bajo la lluvia” (Stanley Donen y Gene Kelly, 1952), entre otros escritos sobre sociología y semiótica. En esta ocasión, el director escribió un guion sumamente intimista al encerrar a sus dos personajes en una habitación de hotel de la que no saldremos en los apenas 78 minutos de duración. Un robot (Tilda Swinton) es enviado a la Tierra para traer un mensaje de paz a los seres humanos. Diseñado con el único objetivo de ir al Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) para acceder a las Naciones Unidas, llega por error a Amman, en Jordania, precisamente cuando el país se encuentra golpeado por los disturbios del Septiembre Negro de 1970. A causa de esto, el corresponsal británico Sullivan (Bill Paterson) debe informar de la actualidad desde su habitación del hotel, coincidiendo con el robot. Ella le confiesa su propósito, mientras él pone en cuestión su testimonio.

lunes, 9 de agosto de 2021

¡LADRONES DE TIENDAS DEL MUNDO, UNÍOS!

12 de septiembre de 1987. Se trata de una fecha inolvidable en el mente de muchos. En las radios de medio mundo se anunciaba una noticia que marcaba un antes y un después en las vidas de sus seguidores. The Smiths había tomado la decisión de separarse definitivamente. Así es, Patrick Morrissey y Johnny Marr tenían tanta tensión entre ellos que, al final, la banda de Manchester “pasó a mejor vida”, pero sus himnos han sobrevivido al paso del tiempo, siendo vitoreados y admirados generación tras generación. Todavía resuenan las notas de “This Charming Man”, alguno aún conservará aquellas pegatinas que exclamaban “Meat Is Murder”, en honor a su segundo álbum de estudio, con el especial “How Soon is Now?” y, cuando ya tocaban la corona británica de la música, la historia se apoderó de “There Is a Light That Never Goes Out”, “Bigmouth Strikes Again” o “Panic” en las calles londinenses con su pegadizo “Hang the DJ”.

El director y productor estadounidense Stephen Kijak aún recuerda aquellos tiempos y es por eso que su segundo largometraje de ficción rinde un homenaje a tan emblemática formación. Tras ocho documentales a sus espaldas y su participación en 2014 en la serie documental “La galerie France 5”, con el episodio “Rolling Stones, La French Connection”, el cineasta se mantiene dentro de su pasión, el mundo de la música, retratando lo que supuso aquel fatídico día para toda la legión de fans de The Smiths. “Shoplifters of the World” se sitúa en Denver para contar el ultimo día de cuatro jóvenes amigos, Cleo (Helena Howard), Sheila (Elena Kampouris), Patrick (James Bloor) y Billy (Nick Krause), que tomarán caminos distintos para seguir con sus vidas, ya sea la universidad, una carrera militar o un viaje sin destino. Cuando Helena se despierta ese 12 de septiembre, descubre que su grupo favorito se disuelve y, con ello, una era completa. Ya nada volverá a ser lo mismo. Su visión es compartida por Dean (Ellar Coltrane), el dependiente de la tienda de discos que la permite robar libremente porque está enamorado de ella. A partir de ese momento, los cuatro amigos disfrutarán de las horas que quedan para comenzar un nuevo capítulo.

martes, 3 de agosto de 2021

EXTRAÑOS RECUERDOS DEL HORROR (2019)

De alguna u otra manera, el cine húngaro que nos llega siempre termina sorprendiendo muy gratamente. No es muy asiduo en nuestra cartelera como otras cinematografías europeas, pero lo cierto es que en nuestra memoria siguen permaneciendo las obras de cineastas tan emblemáticos como Béla Tarr, Miklós Jancsó y el internacional Charles Vidor. A su vez, las nuevas generaciones también están haciéndose un hueco muy importante en la red de festivales internacionales, como fue el caso de László Nemes, cuyo primer largometraje “El hijo de Saúl” (2015) le encumbró de golpe en el panorama global. Entre los más jóvenes, destaca el premiado director, guionista, productor y editor Kristóf Deák, con una carrera muy enfocada al cortometraje tras ocho piezas producidas, en su mayoría, en Reino Unido, siendo “Sing” (2016) la más importante de todas al alzarse con un Óscar al mejor cortometraje de ficción en 2017 con una historia basada en el inquietante secreto que compartían los miembros del coro de un colegio de Budapest.

Su ópera prima, “Cautivos” (2019), nos invita a regresar al pasado, a despertar a la memoria histórica de la Hungría comunista. La década de los 50 se convirtió en un punto de inflexión en un país que se veía arrastrado por el proceso de desestalinización. En este contexto, la película nos presenta a la familia Gaál, residentes en Budapest. Estamos ante las primeras horas del día 4 de junio de 1951, para ser más exactos. Se trata de una fecha clave porque, en cuestión de poco tiempo, todo cambia para Ernõ (Ernõ Fekete), Ilona (Zsófia Szamosi), Eszti (Abigél Dömötör) y el pequeño Peti (Ágoston Sáfrány). Acaba de amanecer en la capital cuando dos autoridades se presentan en su hogar. Sorprendidos por tal visita, dejan pasar a los dos, que cierran con llave la puerta a su paso. Desde ese momento, nadie podrá salir de la casa. Ninguno de ellos sabe qué sucede ni la causa por la que se ven retenidos. Del mismo modo, sus vecinos, extrañados por lo que estará sucediendo en el interior del piso, no retiran la mirada del piso. Pronto comprobarán que todo el que llama a la puerta, no vuelve a salir.